martes 17 de noviembre, 6:20 PM Geek.com.br PUBLICIDAD Nada como una computadora nueva, recién llegada de la tienda, flamante, impecable y limpita. Pero el tiempo va pasando, lo que era blanco se va tornando gris, y lo que estaba limpio se pone grasiento. A ese paso, la suciedad toma posesión del equipo. En dispositivos portátiles el problema es aún mayor: la versatilidad de tales equipos implica llevarlos a la cocina a la hora de probar una receta nueva; a la sala a la hora de trabajar, a la habitación a la hora del descanso, y a veces hasta el baño a la hora de aquella lectura solitaria. Por más cuidado que se tome, es inevitable, en algún momento la computadora necesitará de una buena limpieza. Pero, ¡a no desesperar! Por más percudida que haya quedado su computadora, es posible dejarla brillante, como nueva, sin mucho esfuerzo. Ante todo, olvídese del alcohol y similares. Productos para limpieza muy concentrados pued...