"Los que no tienen la obligación de gobernar pueden decir cualquier cosa"

Así lo sostuvo Bielsa durante la presentación del Plan Agropecuario llevada a cabo en el día de ayer Barrancas. También destacó que la provincia pudo hacer frente a la inundación gracias al ahorro que había hecho el gobierno. Y prometió no subir los impuestos.

Fuente: De Frente LT9 / La Capital

El candidato a gobernador del Frente para la Victoria, Rafael Bielsa, presentó ayer su plan productivo agropecuario para Santa Fe. Lo hizo en un establecimiento rural, La Lonja, próximo a Barrancas (departamento San Jerónimo) frente a casi 400 agropecuarios. Participaron del acto (asado con cuero incluido) el candidato a vice, Carlos Galán; el senador nacional, Carlos Reutemann; el presidente del bloque de diputados nacionales, Agustín Rossi; el diputado nacional Oscar Lamberto, y legisladores provincias. En su discurso, Bielsa criticó a la oposición que desde una tribuna (como el caso de Miguens) ataca al gobierno. También señaló que una de las bases del crecimiento de la provincia tuvo como elemento principal “la fuerte inversión del Estado. Hubo ideas claras y hubo gente que se colocó a dos leguas del ferrocarril porque sabía que tenía que despachar su producción por allí. Entonces, de lo que se trata ahora es de tener las mismas ideas claras y hacer una enorme incorporación de tecnología para recolonizar Santa Fe”. Para cumplir son ese cometido dijo que se necesita un “Estado poderoso, que pueda intervenir y ayudar en las actividades estratégicas”, y que eso se logra de dos maneras “o se aumentan los impuestos, lo que no es nuestra idea, o se aumenta la producción, que es nuestra idea”. Además destacó que se propone “asegurar el abastecimiento interno a precios compatibles con el poder adquisitivo del salario, asegurar la ocupación de todo el territorio provincial, incorporar y capacitar a los trabajadores del campo a través de la creación de escuelas rurales y retener a la población en las pequeñas localidades”. Bajo la alfombra El tema de la falta de un debate entre los candidatos a gobernador fue un disparador para caerle al Frente Progresista: “Me parece que no debatir cuando se propone un cambio es barrer y poner las cosas debajo de la alfombra”, sostuvo, luego disparó: “Por qué el socialismo no votó los acueductos, los gasoductos? ¿Por qué no votó el presupuesto sin proponer otro como alternativa? ¿Por qué no votó los 17 kilómetros que eran imprescindibles para la instalación de Cargill en Villa Gobernador Gálvez? ¿Por qué no votó todo lo que no votó y por qué se opone al Master Plan del Puerto de Santa Fe? El debate sirve para rendir cuentas de todas esta cosas. Es muy difícil explicarle a la gente tantos sinsentidos?”. Agua bendita “Daría la impresión de que (los socialistas) están todo el día orinando agua bendita y los demás somos todos unos salvajes”, disparó, por su parte, Reutemann. Le habían preguntado por qué siempre lo critican desde ese sector. Con evidente fastidio respondió: “Ellos tienen una persecuta continua; siempre están con un discurso machacando sobre lo mismo, con el tema de la Justicia, como si uno manejaría la Justicia por teléfono. Tienen un discurso muy agresivo”. Luego vendría lo del agua bendita.