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Es una las mayores congregaciones de la Iglesia. Tomó la decisión basado en la doble vida de su fundador acusado de abusos sexuales y fraudes millonarios.
Confirmando la primicia que dio hace un mes Clarín, acerca de los preparativos para intervenir una de las órdenes más grandes de la Iglesia, el Vaticano anunció hoy que el Papa dispuso una "visita apostólica", que equivale a la intervención, de los Legionarios de Cristo.
La decisión se debe a que su fundador, el padre mexicano Marcial Maciel -quién falleció hace unos meses en Estados Unidos- fue repetidamente acusado de llevar una doble vida, con abusos sexuales de chicos y seminaristas, la convivencia secreta con una mujer y la existencia de una hija de ambos.
Los ultraconservadores Legionarios de Cristo publicaron hoy la información en su sitio de Internet. En la carta que el cardenal Tarcisio Bertone dirigió al sucesor de Maciel, padre Álvaro Corcuera, también mexicano, el Vaticano le informa que Benedicto XVI dispuso "el nombramiento de un equipo de prelados, obispos y eclesiásticos que realizarán una visita apostólica a las instituciones" de la orden.
El cardenal Bertone señala que la Iglesia y el Papa reconocen "los altos ideales" que animan a la orden y le expresan su "solidaridad ante las actuales vicisitudes".
El padre Marcial Maciel, que fue siempre apoyado, defendido y protegido por el Papa Juan Pablo II, está además acusado de haber realizado cuantiosos fraudes con los fondos que maneja la orden, financiada por contribuciones de muchos simpatizantes tan ricos que en España y México han sido rebautizados "los millonarios de Cristo".
El padre Corcuera, en una carta al cardenal Bertone, le expresó la "profunda gratitud al Santo Padre". La misiva del Secretario de Estado lleva fecha del 10 de marzo.
A principios de mes, Clarín informó que debido a los escándalos, iniciados hace varias décadas –la orden fue fundada en 1941- el Papa tenía en la mira a los Legionarios de Cristo y que la intervención parecía inevitable "para salvarla del precipicio".
Varias figuras del mundo católico habían pedido públicamente que el Papa interviniera la congregación para poner fin a los escándalos que desprestigian a la Iglesia y al mismo pontífice. El cardenal arzobispo de Sidney, Australia, George Pell, se sumó a la exigencia de enviar una visita apostólica para que investigara a fondo la doble vida del padre Marcial Maciel.
Los Legionarios de Cristo están diseminados en 22 países, entre ellos, Argentina. Cuentan con unos 800 sacerdotes, 60 mil miembros orgánicos y 400 mil simpatizantes. Su presupuesto global llega a los 650 millones de dólares anuales.
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