TRAS DENUNCIA DE IRREGULARIDADES EN GERIÁTRICO

Fue desplazado el Director de la Tercera Edad de la Provincia

Osvaldo Ortolani, por orden del Gobernador, fue desplazado ésta mañana de su cargo. La desidia en el hogar para ancianos llegó a tal punto que la directora festejó su cumpleaños con un stripper en el comedor. Fuente: La Capital / LT9 La directora festejando su cumpleaños en el comedor del efector con un musculoso stripper, abuelos durmiendo en pabellones helados ya que no funciona la calefacción, cocineras que se hacen cargo de las guardias de enfermería y chequeos médicos prácticamente inexistentes. Esto es parte de lo que está sucediendo por estas horas en el geriátrico provincial Jorge Raúl Rodríguez (Presidente Perón y Provincias Unidas), una institución que depende de la Secretaría de Promoción Comunitaria, y donde viven 59 ancianos de escasos recursos, 37 de los cuales necesitan cuidados permanentes para poder desplazarse . Las irregularidades fueron denunciadas ayer por un grupo de internos y empleados del geriátrico, quienes presentaron un escrito avalado por la firma de más de una decena de personas ante la Defensoría del Pueblo de Santa Fe. Los denunciantes, que accedieron a dialogar con La Capital con la estricta condición de que no se revelaran sus identidades, narraron un sinnúmero de situaciones prácticamente increíbles. Según destacaron, la gota que colmó el vaso cayó durante los primeros días de febrero, cuando la directora de la entidad, Graciela Silvero, no tuvo mejor idea que festejar su cumpleaños dentro del efector junto a un musculoso joven. De acuerdo a las fuentes consultadas, la fiesta se habría desarrollado entre el 9 y el 10 de febrero. Pero eso no es todo, lo que más sorprendió es el horario en que la directora llevó a su fornido amigo hasta el geriátrico de Presidente Perón y Provincias Unidas para sumarlo a los festejos. De acuerdo a los datos que pudo recabar La Capital, el particular evento se desarrolló uno de esos dos días en el horario que va desde las 13 hasta las 15.30. El escenario elegido para montar el show fue uno de los pabellones del geriátrico donde funciona la cocina y el comedor en el que a diario almuerzan los ancianos. El sitio está ubicado a escasos metros de los dos edificios donde viven los 59 internos, 37 de los cuales no pueden valerse por sí mismos y necesitan la asistencia prácticamente permanente de una enfermera. El evento fue retratado en fotografías a las que accedió este diario y donde se ve a Silvero sentada sobre el stripper mientras otras empleadas del efector , entre las que se ve a la jefa de enfermeras, Susana Ricci, se ríen desde una mesa en la que se observan algunas botellas de cerveza. A juzgar por el horario en el que se realizó el ágape, todo indica que se desató ni bien los abuelos terminaron de almorzar y se dirigieron a las habitaciones para emprender sus habituales siestas. Pabellones helados Lo cierto es que más allá de este particular festejo de la directora, la denuncia incluyó otras irregularidades que, de acuerdo al testimonio de abuelos y empleados del efector, se vienen desarrollando desde hace al menos dos años. Así, destacaron que los pabellones en los que duermen los ancianos son "verdaderas heladeras". En los dos largos edificios hay instaladas en total cuatro estufas a gas, pero hoy "por cuestiones presupuestarias" sólo funcionan dos en cada pabellón. Claro que en uno de ellos la cosa es aún más complicada porque ninguna de las dos estufas funciona. "A la noche esto es una heladera", graficó un abuelo que lleva varios años en el efector. Sin anafes Para peor de males, los ancianos se quejaron porque la conducción del geriátrico decidió "sacar los anafes" con los que a la noche se podían tomar un "té caliente. Lo que pasa es que nosotros cenamos muy temprano, después de las 19, y hasta el otro día a la mañana no comés nada. Entonces a la noche nos calentábamos alguna sopita o un té, pero ahora no tenemos nada y encima no anda la calefacción", explicó uno de los internos. El grupo también remarcó que "hace dos años" recibían la visita de un médico "todos los días", al tiempo que aseguró que "ahora sólo viene unos 15 minutos por semana". También revelaron que "ya no se hacen más los chequeos generales" a los que se los sometía cada seis meses, y se lamentaron porque tampoco concurren más al efector el peluquero, el psicólogo y la manicura. No fueron pocos los que recordaron que hace dos años "la camioneta del geriátrico era utilizada para trasladar a los internos hasta los hospitales", situación que cambió en los últimos meses. "Ahora sólo la usan la directora y algunos allegados", subrayaron. También se quejaron porque en la actualidad "la ropa ya no se lava en el geriátrico. La llevan afuera y después cuando la traen te dan cualquier cosa. No les importa si lo que te dan es el pantalón o el saco que vos tenías. Te dan lo que viene", graficó un abuelo que para evitar la pérdida de algunas de sus prendas, por estos días opta por lavarse él mismo la ropa. "Y no somos pocos los que hacemos esto", aseguró. A su lado, otro anciano dijo sin titubeos lo que en realidad siente gran parte de sus compañeros. Lo que pasa es que la mayoría de los que estamos acá, estamos olvidados", resumió. "Casi nadie nos visita y quedamos solos. ¿A quién le va a importar lo que nos pase?", se preguntó tratando de buscar una respuesta. Esas respuestas quizás lleguen ahora de mano de la Justicia. Por el momento la denuncia ya está en la Defensoría del Pueblo de la provincia. Director de la Tercera Edad Por orden del gobernador Obeid fue desplazado de su cargo el Director Provincial de la tercera edad, Osvaldo Ortolani. Aún no se conoce el nombre de su reemplazante. La secretaría de Promoción comunitaria, de la cual depende el geriátrico, ha intervenido ésta institución. Juan Carlos Forconi viajó a Rosario para ultimar éstos detalles.